domingo, 29 de agosto de 2010

Aprende a escuchar



Las mentes irreflexivas galopan sedientas de ruido, les espanta el silencio, viven entre gritos y sordas hablan entre dientes. En el loco ajetreo inconsciente arrojan palabras huecas cargadas de grotescas pantomimas que muestran desnudas a esas almas vacías. Hablan con las vísceras, sus voces están maquilladas para esconder la mentira o la ignorancia, despotrican o aúllan cuando con palabras esperan cubrir sus motivaciones viles.

Nunca piensan lo que dicen, tienen atrofiada la masa encefálica y hablan sin sentido porque no saben escuchar… les asusta el diálogo, vegetan encerrados en tediosos monólogos que asesinan toda conversación. Hablan sin parar, hablan sin pensar, aplastan las voces diferentes y rinden culto al veneno de sus gruñidos.

Antes de hablar, frena la lengua, pon a trabajar el ocioso cerebro y piensa, no sea que te conviertas en esclavo de amargas palabras que hubieras preferido no pronunciar. Si debes hablar no tienes por qué callar, expresa con firmeza tu pensamiento, defiende con nobleza tus ideas; pero si no tienes que decir, guarda silencio, no tienes por qué danzar con la música ajena.

Más importante que hablar es escuchar… los senderos están poblados de peregrinos rotos que ya no pueden andar y antes de morir aspiran narrar sus hazañas, recitar sus desgracias y desahogar la carga que los abruma. Hablan con dolor, pero no necesitan lástima ni sabios consejos, están hartos de lecciones y reproches, solo quieren que sus tímidas voces sean escuchadas.

Escuchar es guardar un silencio fecundo del que florece una palabra de paz y una mirada de armonía que rompe las fronteras del egoísmo.

sábado, 21 de agosto de 2010

La vida es bella





¡La vida es bella! Es una sinfonía original y policroma que destella luz y esplendor, una senda virgen que con ternura ansía las huellas del caminante, un lienzo inédito para pintar la existencia; una lágrima, un beso, una sonrisa…

La vida es un exquisito vino rojo para saborear, sorbo a sorbo, gota a gota. Si lo bebes deprisa, nunca entenderás su aroma y ebrio romperás el timón y tu barca encallará pisoteada por los vientos. Se embriagan los vanidosos y los altaneros que esperan que el mundo se rinda a sus pies, los que tragan botella tras botella y luego amanecen vacíos y hediondos… La vida es noble como el vino que danza en el paladar y contagia de una suave y dulce sensación de felicidad.

La vida es un camino que hay que transitar con optimismo, ilusión y empeño. Hay que andar… los que se tiran al suelo cuando les abruma la lejana cúspide, los que se duermen, los que ruedan cuesta abajo, esos nunca van sentir la emoción que embelesa a quien contempla el valle desde la cumbre. Se marcha con optimismo… los quejumbrosos, los aguafiestas y los pesimistas no caminan, se arrastran, se enredan en la maleza y con los primeros tropezones regresan al estercolero. Hay que andar… con la ilusión de los aventureros, que resisten con dignidad los chubascos, vendan sus heridas, permanecen alertas en las oscuras noches y confían que el nuevo amanecer los alcanzará cuando hayan realizado su mejor esfuerzo para escalar la agreste montaña.

La vida es bella… para quienes cincelan, a golpe de martillo, una estela de amor; para los enamorados que disfrutan besos, lágrimas y sonrisas; para los peregrinos que desafían las tormentas y con su empeño conquistan la escarpada cumbre. ¡La vida es bella! ¡Vívela a plenitud!


sábado, 14 de agosto de 2010

Sacrificio




El sacrificio es una prueba de fuego sólo para audaces, es la pasión que consume a los prometeos que no le temen a las heridas, es el grito de los que a fuerza de sangre conquistan las cumbres de la tierra y el cielo de los inmortales. ¡A golpe de sacrificio se doblegan las murallas del adversario!

Los holgazanes que parecen puercos de engorde, los niñitos blandengues que no quieren ensuciar las uñas y los cómodos que se amilanan frente al trabajo, jamás van a vencer en una batalla, porque ni siquiera se imaginan luchando. Los que chillan cuando hay que empaparse de sudor y se pudren en las ciénagas del fracaso porque son incapaces de intentar salir adelante, se olvidaron de vivir y vegetan una historia rancia y vacía.

Sueña, contempla la cumbre que anhelas, siente el triunfo en tus manos, entonces… aprieta con fuerza, ponte en camino y lucha hasta el final. Los que se rinden nunca llegan a la meta, la cúspide está reservada para aquellos que, arrastras tal vez, cansados, apaleados, perseveran hasta el último minuto.

Los que temen al sacrificio compran sus medallas, no tienen escrúpulos y se venden al mejor postor, salen adelante porque atacan con la lengua ponzoñosa y empujan a los demás… quieren el éxito, pero no estudian ni trabajan, no se esfuerzan ni se complican la vida.

Para volar sin límites, ser libre y conquistar la gloria, hay que luchar sin descanso; mientras los demás duermen plácidamente o se emborrachan de pegajosas frivolidades, hay que desvelarse trabajando... al final, con el sudor en la frente, desde la cima, vas a contemplar el majestuoso horizonte reservado para los audaces que se sacrificaron con alegría.



sábado, 7 de agosto de 2010

Camina sin parar





Lucha con voluntad de hierro para conquistar tus sueños, no importa si en la batalla te hieren o si mueres por defender tus ideales; pero nunca te sacrifiques por el aplauso que arrojan las multitudes y no pretendas que tu camino sea del agrado de moros y cristianos. Si te afanas en complacer a todos no tendrás el temple para maniobrar con libertad y serás el banquete de las tertulias y los baños públicos.

Camina con firmeza, sin dejarte manipular por el beso lisonjero ni la sucia amenaza del fanfarrón que a costa tuya quiere lucirse. Los que adulan te engañan para saciar su hedionda miseria y los chantajistas gritan para esconder sus temores e impotencia. Avanza siempre y no te asustes por las huecas carcajadas que vomitan las hienas y los zarpazos de las aves de rapiña.

Los perversos que se burlan de tus caídas y te den la espalda cuando haces el ridículo, son los mismos que te vitoreaban cuando estabas en la cima y satisfacías sus caprichos; si les das de comer te van a exaltar, pero si no les apetece tu plato lo van a tirar a la basura. Nunca sudes para quedar bien con alguien, menos para cautivar las víboras que suavemente se enrollan en tu cuerpo y cuando estás atrapado oprimen hasta ahogar.

Camina sin parar. Siempre hay habladurías, amargos resentimientos y comentarios miopes que pretenden enlodar tus intenciones, no dejes que los sórdidos aullidos y las fastidiosas muecas pueriles detengan tu marcha; no interrumpas la lucha para dar explicaciones, los zopilotes sólo saborean carne podrida.

Trabaja para moldear la frágil arcilla de tu destino y no te dejes atrapar por la viscosa telaraña del que dirán, no te amedrentes por los ultrajes que escupen los puritanos que hipócritamente se escandalizan de tus ideas… si hay paz en tu interior y no pretendes quedar bien sino actuar con rectitud… camina sin parar… con la frente en alto, la mirada tranquila y las alas extendidas para surcar el azul infinito de los inmortales… camina sin parar…